Ubicado en el corazón de Providencia te encuentras con un letrero muy sugerente; “EL Taller, Club de Helado y Café” ¿Un Taller y Club al mismo tiempo? La idea nos atrae. Pedimos la entrevista y para salir de toda duda hablamos con Diego Lisoni, el dueño de El Taller, Club de Helado y Café.
Hola Diego. ¿Qué es El Taller, un Restaurante, una Heladería, una Cafetería?
¡El Taller es un poco de todo! Recientemente salimos elegidos entre los 100 mejores restaurantes de Chile por una prestigiosa publicación, pero tenemos clientes que vienen por nuestros helados, otros por el café, otros por los desayunos, almuerzos caseros, en fin, la experiencia de El Taller se caracteriza por la calidad y la dedicación de sus servicios, en constante desarrollo y de amplia forma.
¿Por qué se llama El Taller? ¿La ambientación dedicada del local, en qué se vio influenciada?
Taller viene de Atelier, lugar donde se hacen cosas con las manos. Hoy hacemos nuestros helados de forma artesanal y de alta calidad, jugos naturales, café de especialidad, horneamos nuestro pan, ensaladas con productos seleccionados cada mañana, postres hechos en casa y la investigación de nuevos productos. La ambientación surge de la necesidad de contar con un espacio acogedor y luminoso, que nos ayudara a transmitir la pasión que le ponemos. En esto fueron clave dos amigas, Francisca Errázuriz y Macarena Sánchez, diseñadoras de interior que pusieron toda su pasión y nos siguen acompañando en próximos desafíos.
Cuéntanos cómo se origina y se le da vida a El Taller, ¿Cómo fueron esos primeros días?
El Taller surge del helado y crece a complementos que luego toman vida propia. Todos quienes trabajamos aquí nos sentimos orgullosos de lo que hacemos y lo que El Taller nos va pidiendo. Al abrir, la gente quiso darnos una oportunidad y creemos que no los defraudamos, hemos conocido muchas personas, conversado harto, recibido invaluables consejos y conquistado dificultades.
Leímos en una revista que se preocupan mucho de las propiedades del agua que utilizan. ¿Qué otras particularidades en cuanto a proveedores tiene El Taller?
El agua es clave para todo, nuestra composición y la de todo tiene su presencia, su capacidad de transmitir y almacenar energía y su capacidad como solvente universal. Hoy trabajamos con agua filtrada con una composición y concentración de minerales extraordinaria para nuestros helados, jugos y café. Es una maravilla.
La relación con proveedores es clave, – prosigue Diego – hoy tenemos buenas y sanas relaciones que incluyen algunos productos que son hechos a la medida de las necesidades de El Taller, como el café que es tostado con perfiles desarrollados en conjunto, frutas, algunos ingredientes de helados tales como las avellanas, que vienen del Sur de Chile. En fin, somos parte de una cadena muy bonita de trabajo en equipo que permite lograr productos de calidad.
¿Es cierto que para Fiestas Patrias ofrecieron helado sabor a Chancaca Pasada? ¿Cómo se gesta este original sabor y los otros que han tenido a disposición de los clientes en El Taller?
Si, lo hicimos. Hemos desarrollado varios helados novedosos. Desde tomar la galleta Negrita y hacerla helado, vainilla lavanda, harina tostada, chancaca pasada, frutas puras, etc. Cada receta es única y probada muchas veces hasta llegar a productos que nos llenen de orgullo pero siempre pensados desde la experiencia que todos hemos tenido, ojalá que nos traiga recuerdos bonitos y que, por supuesto, sea exquisito.
Fueron elegidos entre los mejores 100 restaurantes de Chile por la prestigiosa guía La CAV ¿Qué les permitió obtener esta distinción?
Trabajo duro. Somos apasionados del servicio y de hacer productos de calidad, eso nos mueve, a eso aspiramos siempre. Recibimos con orgullo ese reconocimiento y seguiremos trabajando con toda nuestra energía para que la experiencia en El Taller sea siempre espectacular.
¿Cuál o cuáles son los factores diferenciadores de El Taller?
Productos de alta calidad, un servicio amable y un ambiente acogedor. En particular los helados de alta calidad, jugos naturales 100%, café de especialidad, comida rica, ensaladas, sandwiches y postres. ¡Hay mucho que probar!
El local de El Taller marca diferencias en el barrio donde se enclava, por los cómodos espacios y la dedicada atención de su staff.
Hay creaciones verdaderamente únicas, como la «Torre de Waffle» ¿Qué tal le ha ido a este fantástico postre?
Súper, la mezcla de waffle calentito, helado artesanal y salsa es una maravilla. La gente se sorprende y a nosotros ¡nos encanta!
Primero fue helado sabor a Galleta Negrita, ahora se puede pedir helado sabor Galleta Tritón. Versiones exquisitas… ¿Cómo lo logran? Coméntanos un poco el proceso creativo.
Hay que partir de la observación y luego ir probar, probar, probar…
Están siempre preparando productos acordes a las fechas festivas que se viven, por ejemplo la Copa Día del Padre o los Bombones Helados para el Día de la Mamá. ¿Qué tan importante es reaccionar rápido ante días especiales para tener un producto de edición limitada, o están tan organizados que ya lo tienen considerado meses antes?
Nos vamos armando entre todos, pensando que nos gustaría que nos regalaran jajaja. Tenemos nuestra programación pero vamos conversando con nuestros clientes y oyendo las sugerencias a diario. ¡Muchos de esos productos surgen de ideas de nuestros clientes!
¿Cómo trabajan los productos “Light” o “Diet”?
En cadenas de elaboración separadas y con materias primas específicas para entregar una alternativa RICA a quienes tienen requerimientos especiales. Por ejemplo, nuestro helado de chocolate para diabéticos e hipertensos es una maravilla.
Probar una «Edición Limitada» todo el tiempo es tentador. ¿Es una estrategia base de El Taller?
¿Qué otras estrategias de marketing nos pueden compartir?
Si entras a El Taller no encontrarás ninguna marca comercial de nada. Esa es nuestra estrategia, que lo que sea que pruebes hable por si solo y que siempre vivas grandes momentos con productos de alta calidad.
¿Planes de El Taller para el 2017?
Queda poquito para el 2017… Siempre mejorar es la consigna y es posible que El Taller crezca, siempre con control de su calidad de productos, servicio y ambiente. Ya les contaremos…
¿Cuál es tu visión de la industria heladería artesanal? ¿Cuáles en tu opinión son sus fortalezas y debilidades?
Hoy no se sabe casi nada de helado en Chile, de recetas y balanceo de las mismas. Yo me he tenido que capacitar de las formas más curiosas, pero formalmente es difícil aprender a balancear recetas en Chile.
La industria crece, hay más heladerías, nosotros llevamos 1 año y medio, es poco tiempo para hacer un gran análisis pero desde nuestra humilde posición vemos más locales que venden helado, pero con muchos desafíos pendientes en calidad y desarrollo. No se puede generar una identidad del helado en Chile si se dedican a copiar las recetas que les trae un proveedor desde otro país para que ocupen sus productos, porque pasan dos cosas: 1.- No van a desarrollar nada, con un estancamiento cultural sobre este tema y 2.- sus costos son altísimos.
Terminamos la entrevista con un exquisito café de especialidad en la mano, que puede pedirse de diversos orígenes (Perú, Etiopía, Nicaragua y de otros lugares del mundo), en este caso de Costa Rica, 100% Arábica, tostado por Café Altura. Un detalle más; una carta muy bellamente diseñada. ¡Todo entra por la vista!
Fuentes :
RedBakery
