El concepto de las 3R; reducir, reutilizar y reciclar, basado en disminuir los residuos y ser más consiente con el medio ambiente, es uno de los temas más importantes en el presente, ya que la problemática ambiental ha sido un factor que ha reformulado hasta la forma de alimentarse.
Según la FAO son 1.300 millones de toneladas de alimentos se pierden o desperdician anualmente en todo el mundo, y tan solo en Chile para el 2015 según el ente, alrededor de 63 kilos de pan fueron desperdiciados por familia al año. Cifras bastante preocupantes que han llevado a muchos innovadores a dar soluciones al desecho de alimentos.
El investigador Dr. Aydin Berenjian, trabaja desde el 2015 en Nueva Zelanda, en buscar una salida ecológica al desperdicio de pan. En este país los desperdicios son de alrededor de 7 mil toneladas de pan blanco al año, y este investigador quiere dar un giro a la problemática, y convertirse en el principal reciclador de pan en el mundo.
La compañía de alimentos Goodman Fielder en conjunto con el Dr. Aydin Berenjian profesor de la Universidad de Waikato, en el 2015 comenzó a investigar sobre los modos viables de reutilizar el pan duro. Actualmente ambos en colaboración son los únicos en el mundo que se dedican al reciclado de pan no vendido.
Según el investigador, el pan que no es vendido en los supermercados y tiendas vuelve a sus fabricantes, para luego convertirse en una gran problemática, ya que la acumulación de grandes toneladas de pan, deben acabar en la basura, “Usualmente hacen migas de pan, pero la mayoría termina en los basureros. Y cuando llega al vertedero, causa enormes problemas ambientales, además de millones de dólares perdidos», comenta el Dr. Berenjian.
Goodman Fielder y el Dr. Berenjian, dan una mejor salida a esta problemática, realizando productos fermentados. Estos son elaborados a través de un proceso de tratamiento al cual es sometido el pan no vendido, para luego ser convertido en pan fermentado, un producto nuevo que según los expertos es superior al pan habitual, contando con un alto perfil de aminoácidos esenciales, almidón resistente y una vida útil más larga.
“Cuando el pan termina en un vertedero genera lixiviado -líquido resultante de un proceso de percolación de un fluido a través de un sólido-, el cual contamina las aguas subterráneas; también produce dióxido de carbono (CO2), lo que contribuye al calentamiento global “expresó el Dr. Berenjian.
Un producto que ha recibido elogios, ya que los comensales aseguran que es un mix entre el pan blanco y la masa madre, aportando mayor beneficios nutricionales. Este proceso de fermentación es realizado durante un día, en todo el proceso de elaboración y empaquetado, produciendo una tonelada de pan en un periodo de tiempo de 9 horas.
Este proceso según el experto, puede ser usado para cualquier tipo de pan, pero hasta el momento el pan blanco es el que usa, ya que aseguran, es uno de los más desperdiciados. Además el experto también señala que no posee conocimientos de cuantas veces es posible reciclar un mismo pan.
Con respecto a las temáticas de seguridad alimentaria, el Dr. Berenjian asegura que elimina cualquier tipo de bacteria o microorganismo nocivo para el consumo humano, y de igual forma es un pan que su sabor y textura varía dependiendo de la antigüedad en que haya llegado el pan blanco.
Los expertos aseveran que las etapas de prueba continúan. Esperan vender las primeras rebanadas fermentadas a mediados del próximo año, “Seguimos en etapas de testeos, pero los resultados son muy prometedores. Estoy seguro de que muchas empresas estarán interesadas en utilizar este proceso, porque 1,2 millones de toneladas de pan desperdiciado se traducen en millones de dólares en pérdidas”, argumento el Dr. Berenjian.
Una gran iniciativa, que innova los procesos del ciclo de producción del bakery industrial, donde el uso y aprovechamiento del producto final, será de gran beneficio no solo para el medio ambiente, sino también para seguir evolucionando en materia de reducción de residuos y por supuesto de un mejor uso de los presupuestos de las industrias.
Fuentes :
www.planeta-2.com www.stuff.co.nz