Al igual que en Chile, el volumen de consumo de helado per capita de los argentinos ha crecido bastante fuerte. También han crecido las ganas de sus marcas de buscar nuevos mercados…
El consumo local sube exponencialmente. En 1997 los argentinos comían en promedio 3 kilos de helado anuales. Este guarismo subió a casi 7 kilos por persona anuales durante el periodo 2017. Muy a pesar de estas cifras alentadores, Argentina sigue por muy lejos del consumo de mercados muy maduros para este producto como lo son Nueva Zelanda (28,4 kilos), USA (20,4 kilos) o Australia (18 kilos per capita).
Y es un mercado muy orgulloso de sus raíces y que no recibe siempre bien “al amigo cuando es forastero”. Destacamos la fallida irrupción de Häagen-Dazs una de las cadenas reinas de estados Unidos, que desembarcó en la capital argentina, Buenos Aires a fines del siglo pasado (1996) con el objetivo declarado de liderar el mercado local y ya en 1998 debió cerrar sus sucursales debido a la falta de adaptación que mostró la marca norteamericana entre los argentinos. Destaquemos un hecho que retrata un error del gigante heladero para ingresar a este mercado; La decisión de competir contra las heladerías bonaerenses sin sumar el sabor” dulce de leche” (Conocido en estos lares como manjar) en su oferta de sabores. Hay que prestar siempre mucha atención a las tendencias locales, que en este caso son muy arraigadas.
Grido nace a inicios del siglo XXI en la ciudad de Córdoba y en la actualidad que cuenta con más de 1500 locales en las fronteras de su país y exporta 2.500 toneladas de helado a tres países, en los cuales cuenta con franquicias. «En Uruguay tenemos 60 franquicias; en Chile, 50, y en Paraguay, que fue el último país al que entramos, 45», señala Sebastián Santiago, uno de los dueños de la empresa heladera.
Configuraciones comerciales y gustos locales son primordiales para entrar a mercados de otros países, aunque sean vecinos. En el caso de Grido la llegada a Chile se realizó en 2006 y debieron migrar su modelo de franquicias en barrios que implementaron en Argentina porque en Chile es más conveniente tener presencia de marca en malls. Entre el 2006 y el 2011 tuvieron locales en algunos barrios de la capital pero no entregaban las ganancias proyectadas y se cerraron al momento que migraban hacia los grandes centros comerciales que existen en diversas comunas de Santiago y en algunas ciudades del norte y sur de nuestra larga faja de tierra.
Respecto a los sabores, desembarcaron en Chile y se preguntaron ¿Lúcuma, Chirimoya? Por cierto no son sabores preferente entre los argentinos, pero como dice el sabio refrán “En el país que fueres has lo que vieres” incorporaron rápidamente estos sabores, por sobre algunos que gozan de mucho éxito en Argentina tales como el mismo Dulce de Leche, el Sambayón o el Quinoto, que a este lado de la cordillera no se cotizan mucho.
Y tienen una heladería Top 10 mundial…
Gabriel Famá no sólo fue presidente y actual secretario de la Cámara de Heladeros de Buenos Aires, sino que también es el flamante dueño de una de las heladerías más representativas de la ciudad; Cadore Gelato Artigianale. Muy destacada en el libro de la National Geographic “Food Journeys of a Lifetime” y recomendada por famosas guías turísticas como “Lonely Planet”. Desde hace 60 años que su familia endulza la vida de los argentinos en su local, ubicado en la céntrica Avenida Corrientes, muy cerca de afamados teatros de la capital porteña.
Sin embargo y desde estas tribunas y como muy expertos consumidores de helado tenemos un muy buen consejo para nuestros vecinos; deben atreverse a ofrecer nuevas variedades de sabores y presentaciones. Hace muy poco han adoptado el consumo de lo que los mexicanos; las guapaletas que acá conocemos muy bien y desde hace muchos años como Paletas de Helado.
Fuentes :
www.w.clarin.com www.heladeriacadore.com.ar www.w.lanacion.com.ar