La Alimentación 5S: Uno de los Objetivos del Siglo

La alimentación Saludable, Segura, Sostenible, Social y Satisfactoria (5S) es uno de los grandes objetivos del siglo XXI. Y, para lograrlo, sí o sí hay que contar con las legumbres.

Y en nuestro subcontinente, especialmente en Chile, los cambios culturales y alimenticios de los últimos veinte años, han sido negativos para las legumbres, las que dejaron de ser parte esencial de la dieta de los chilenos (y latinoamericanos en general) para dar paso a la comida menos saludable.

«Las legumbres como el garbanzo, la lenteja, el guisante y las habas son reconocidas como fuentes de proteínas, almidón, fibra, vitaminas y minerales. Además, algunos de sus componentes bioactivos ejercen propiedades preventivas en enfermedades tales como la diabetes tipo-2, la hipercolesterolemia, la hipertensión, la obesidad, las enfermedades inflamatorias y el cáncer» señala en su web la Asociación Española de Leguminosas.

“La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) ha advertido que hay que trabajar para cambiar en el horizonte 2050 los sistemas de producción, ya que con el previsible aumento demográfico no se podría alimentar a toda la población, manteniendo los sistemas actuales de producción. Por tanto, empieza a cobrar interés la alimentación sostenible. Es muy importante abordarlo tanto desde el punto de vista de la producción de alimentos, como desde la óptica de la sostenibilidad del planeta, para no agotar todos los recursos”, detalla la Revista Alimentaria.

La necesidad de aumentar el consumo de legumbres se ha defendido desde todos los puntos de vista. Primero con un objetivo nutricional y de salud humana y, más recientemente, también desde la perspectiva de la salud del planeta. A lo que se suman aspectos clave relacionados con la seguridad alimentaria, el valor gastronómico y, en las épocas de crisis que nos ha tocado vivir, su valor social.

Son excelentes para los seres humanos y para el planeta; Las legumbres fijan el nitrógeno de la atmósfera en el suelo, lo que contribuye a mejorar la fertilidad y la productividad de las tierras de cultivo. Esto hace que no sean obligatorios los fertilizantes sintéticos que aportan nitrógeno al suelo y que son contaminantes, por lo que estos nobles alimentos también ayudan a aminorar el cambio climático y el calentamiento global, indican desde Naciones Unidas.

Y hay una alternativa que tiene que ver y mucho con el Bakery en lo global; las legumbres se transforman en materia prima esencial para lo que podríamos llamar, “La Nueva Era de las Harinas”, gracias a los Garbanzos, las Habas y las Arvejas, entre otras.

El portal de gobierno Alimentos Argentinos detalla que; «La innovación dentro del sector alimentario es permanente y dinámica, los consumidores suelen estar expectantes ante los nuevos productos y desarrollos. Las harinas provenientes de las legumbres son una oportunidad para innovar en diferentes propuestas: productos de copetín o snacks, panificados, galletitas, etc.«


Fuentes :
www.theconversation.com www.revistaalimentaria.es www.alimentosargentinos.gob.ar