La tecnología avanza a pasos agigantados cada día y no podemos quedarnos ajenos a ella, de lo contario, más temprano que tarde estaremos obsoletos y fuera de la cancha.
Quien hubiera pensado hace 20 años que hoy en día una gran cantidad de personas tendría su propio teléfono móvil, trabajaría desde la casa, los niños tendrían e-mail casi al entrar al colegio e incluso estudiarían en su colegio de forma online.
Hoy en día la tecnología no solo sirve para mejorar procesos productivos de grandes, medianas o pequeñas empresas como lo veíamos hace algunos años atrás, sirve también para comunicarnos de forma más fácil y para resolver muchas tareas de nuestra vida cotidiana. La tecnología llego para quedarse.
La pandemia nos ha dado una gran lección en cuanto a acercarnos a la tecnología, de forma rápida y oportuna para no quedarnos fuera de lo que sucede a nuestro alrededor, obligándonos de alguna manera a evolucionar con más tecnología. Esto ha sido necesario tanto para niños, jóvenes, adultos e incluso para los adultos mayores, para realizar sus quehaceres habituales como estudiar, capacitarse, trabajar, comunicarse e incluso para poder sacar los permisos para movilizarse.
Es importante darse tiempo para actualizarse y así encontrar las herramientas tecnológicas que nos pueden ayudar a mejorar nuestra vida, ahórranos tiempo y dinero. Hay que tener siempre muy presente que sea en la justa medida, sin abusar de ellas, de manera no se generen malos hábitos y se conviertan en vicios difíciles de desarraigar, los cuales terminen por perjudicarnos más que ayudarnos.
No nos ceguemos ni neguemos frente a la tecnología. ¡Seamos inteligentes y visualicemos los beneficios que la tecnología nos brinda, aprovechémosla!