Sacher, la Deliciosa Historia de un Clásico Austriaco

En el corazón de Viena, se encuentra una deliciosa creación culinaria que ha perdurado a lo largo de los siglos y ha cautivado a los amantes del chocolate de todo el mundo…

Este exquisito postre es mucho más que una simple tarta; es un símbolo de la repostería austriaca y una experiencia gastronómica que combina a la perfección la suavidad del chocolate y la intensidad del Albaricoque (Damasco).

Orígenes Legendarios

Su creación es consecuencia de varios sabrosos giros del destino. La historia de la Tarta Sacher se remonta al siglo XIX, cuando el joven aprendiz de chef Franz Sacher, de tan solo 16 años, se encontró ante el desafío de crear un postre especial para el príncipe Klemens Wenzel von Metternich. En ausencia de su maestro, Franz ideó una tarta que consistía en dos capas de bizcocho de chocolate, separadas por una fina capa de mermelada de albaricoque y cubiertas con una capa generosa de glaseado de chocolate brillante.

El resultado fue un triunfo culinario que conquistó el paladar del príncipe Metternich y de quienes tuvieron el privilegio de probarlo. La receta original se mantuvo en secreto durante generaciones y fue pasada de padres a hijos dentro de la familia Sacher.

Características de la Tarta Sacher

La Tarta Sacher es una obra maestra de la repostería que se ha mantenido fiel a sus raíces desde su creación. Aquí hay algunas de sus características más destacadas:

Bizcocho de Chocolate Esponjoso: La base de la Tarta Sacher es un bizcocho de chocolate extremadamente esponjoso y húmedo, elaborado con ingredientes de alta calidad, como chocolate negro y mantequilla.

Mermelada de Albaricoque: La capa de mermelada de damasco es esencial para equilibrar la riqueza del chocolate. Proporciona un toque de acidez y frescura que complementa la dulzura del glaseado.

Glaseado de Chocolate Brillante: La tarta se cubre con una capa de glaseado de chocolate que se endurece para crear una superficie brillante y crujiente. Esta característica distintiva es una de las razones por las que la Tarta Sacher es tan reconocible.

Servida con Crema Batida: Tradicionalmente, se sirve con una generosa porción de crema batida, que aporta un contraste suave y cremoso que complementa perfectamente la textura del bizcocho y el glaseado.

«Siempre habrá críticos, por supuesto, y algunos encontraron el Sacher-Torte original bastante simple. Después de todo, existieron creaciones más lujosas. La simple verdad, sin embargo, es que la simplicidad es el corazón de la grandeza en nuestro mundo moderno», señala con elegancia el portal oficial de la Original Sacher-Torte.

Hoy en día, la Tarta Sacher se puede disfrutar en el famoso Hotel Sacher en Viena, donde se sigue utilizando la receta secreta transmitida a través de las generaciones. Además, la popularidad de este postre ha llevado a su producción en numerosos lugares del mundo, aunque los auténticos amantes del Sacher insisten en que el original austriaco es insuperable.

Fuentes:
El Gourmet
Original Sacher-Torte
Austria Info

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