¿Necesita el mercado del Bakery en Chile un nuevo Mindset?

Y en concreto, transitamos el tiempos de usar el Agile Mindset; una mixtura de principios, dogmas, y forma de pensar para responder al cambio en ambientes de incertidumbre.

Convengamos que la transformación digital es uno de los tópicos que han marcado la agenda en los últimos años, y si bien los avances han sido sugestivos, la pandemia en que nos sumió el Covid-19 nos mostró la necesidad de una metamorfosis más subterránea, que implica un mindset de cultura digital con nuevas destrezas y capacidades. Por esto el Bakery nacional debe reflexionar, necesita canalizar una propuesta de valor digital, omnicanal, multidispositivo, y de la mayor eficiencia posible, con viajes centrados en el cliente y combinando habilitadores tecnológicos para brindar una experiencia diferencial.

Uno de los grandes cambios fue la anexión de nuevos usuarios apartados sistemáticamente de la tecnología, que se volcaron a los canales digitales para obtener insumos básicos y de indulgencia. Recordemos las primeras semanas de confinamiento y las compras desesperadas en los grandes supermercados…

En cuanto a procesos de negocio, los indiscutidos ganadores de este proceso impuesto por la pandemia fueron la compra online, las aplicaciones de la “última milla” y los servicios de logística. Además, se transfiguró vigorosamente el mercado del trabajo, exponiendo que lo que antes era impracticable y que forjaba acaloradas discusiones respecto de presencialismo y productividad, hoy es el día a día de muchas empresas.

El e-commerce y los procesos de delivery continuarán progresando la transformación que ya iniciaron y los seguirán nuevos procesos, tanto de cara a los clientes -especialmente la postventa- como en ámbitos internos de las compañías -particularmente en Recursos Humanos- que impulsados por la deslocalización y la fuerte competencia por el talento, deberán diseñar una nueva propuesta de valor para los colaboradores. La disputa está hoy entre la mentalidad burocrática y la mentalidad ágil. Es la diferencia entre la adaptación o el estancamiento.

Una mentalidad burocrática, cuando es compartida por decenas de empleados, tiende a crear un tipo de organización radicalmente diferente, y menos adaptable, que una formada por personas con una mentalidad ágil.

Una mentalidad ágil es el conjunto de actitudes que apoyan un entorno de trabajo rápido, ligero. Estos incluyen ciclos de respeto, colaboración, mejora y aprendizaje, orgullo de pertenencia, enfoque en la entrega de valor y la capacidad de adaptarse al cambio. Esta mentalidad es necesaria para cultivar equipos de alto rendimiento, que a su vez brindan un valor increíble a sus clientes.